lunes, 8 de abril de 2013

Las reflexiones personales siempre son una mierda, las experiencias aún están por ver, pero si coges la decisión menos acertada, PUM, te hundes con el barco y la flota.
Mendigamos la experiencia como perros sarnosos y hambrientos un trozo de carne. ¿Qué decir?
Las experiencias bonitas solo le tocan a los imbéciles más grandes que han pisado la faz de la tierra, que suerte manada de cerdos. Me alegro mucho, felicidades... En realidad: No me alegro, y no quiero felicitarte; pero la educación de uno es la madre del aguante.
Que bien tiene que sentirse uno al lado de su pareja, agarrados de la mano, dandose besos estúpidos y viviendo una vida plena de sexo, sexo y más sexo. Que bien encontrar a alguien que te quiera por lo que eres y no por lo que tienes. Que bien encontrar a alguien que, simplemente, no quiera patear tu integridad, llamarte retraso en tú cara y utilizarte. Que bonito, de verdad... Pero las cosas no son tan faciles. 
¿Sabes lo que es que alguien simplemente quiera usar tu cuerpo como envoltorio de su pene de dimensiones: No pillo cacho, probaré con la que me parece la más guarra que estoy que no me bajo y con la mano ya no da para tanto?
¿Sabes lo que es que te machaquen y te digan: no eres perfecta, no eres sociable, la sociedad no se lleva contigo porque eres la rara que nadie acepta, por eso, cambia...?
¿No?
Pues cierra la puta boca, traga te tu mierda y vomitasela en los zapatos a otro alguien que no pueda darte un buen dolor de muelas, cacho puerco.


No hay comentarios: