Paradojas de la vida

Las alas no se ganan tan facilmente, el perdón de la mentira es el más duradero, las lágrimas no se marchan sin dejar rastro. No estoy enamorado, estoy perdido en una espiral de telarañas, me siento atrapado, no hay salidas ni entradas sólo mayor profundidad y vacio, vacio. ¿Me perdonarías algún día si te dijera te quiero? ¿Querrias perdonarme si te lo digo? No doy pasos hacia nadie, me da miedo perder un juego al que no se jugar, de nuevo, meda miedo dejar las llaves de mi corazón a alguien. Perdoname si desconfio, pero es que acaso no me han dañado ya lo suficiente. Siento que me ahogo en un escape de gas, pierdo la conciencia y golpeo el suelo con mi cabeza loca,luego despierto y me doy cuenta de que no he sido capaz de decirlo, me doy cuenta de que todo sigue igual. Crees qué soy cruel. No, lo siento, este mundo esta muy mal repartido, y yo no soy el entremés de nadie, demuestrame que eres tal cual te muestras, demuestrame que mereces la pena y quizás por una vez en la historia de mi vida de el primer paso a la liberación de un vórtice sin fin.

Sueños

-Algún día tocaremos en un escenario.
-Permiteme que lo dude.
-Pero no un escenario enorme y con maravillosos focos. No, no quiero uno de esos, quiero un bar cutre y bohemio con las paredes a trozos.
-No creo que lleguemos a eso si quiera.
-Con esa actitud claro que no.¿Y qué tal en la calle? Eso si podemos hacerlo, nadie nos puede decir que no.
-Si te hace feliz... -Annibal se encogió de hombros.
-¿Acaso no te gusta la música?
-Sinceramente, me encanta. No podría vivir sin ella, pero me da igual el resto del mundo, me da lo mismo si aplauden o me tiran piedras, sólo quiero oír música. Además me resulta maravilloso poder oír tal grato sonido.
-¿No tienes sueños? Es que acaso no tienes ninguna meta.
-Bueno, quizás, no lo sé. Realmente estoy bien como estoy.
-¿No te gustaría que te recordarán?
-Para qué.
-Para dejar huella en este mundo tan arrogante, para eso. Dejas una marca, y todos sabrán que has existido, eso es mejor que nada. Aunque sólo sean unos pocos los que te recuerden.
-Bah, es ridículo. Los que me recordaran son las personas a las que realmente les he importado y no unos desconocidos que presumirían de saber mi vida. Además, en mi opinión un grupo es bueno cuando no busca la fama pero aún así hay gente que lo escucha,sin buscar nada hay gente que los sigue, eso dice mucho del grupo.
-Te falta sangre en las venas, deberías aspirar a lo más alto, porque eso significa que te aprecias y aprecias lo que haces, y eso es algo esencial que deben tener las personas.
-Son dos maneras de verlo, ¿no crees?
Rut se levanta de las escaleras y le enseña la lengua.
-¿Es qué nunca vas a cambiar Annibal?  
Él sonríe y se encoge de hombros.
-Quizás, quien sabe.
Ella le coge de la mano y echan a correr por el parque de arboles en pleno otoño. Ella ríe y corre y él desea rosar sus lasbios con los suyos.

Párrafo suelto

Odias el sonido de los disparos, ¿no? Lo sé, sólo es el sonido de mis gritos rompiéndose en pequeños trozos de sueños rotos. Crees que ya lo he dado todo, pero cariño, aun me queda una bala en la carga de mi viejo revolver sin nombre. Tú apuñalas yo aprieto detonadores, me atrae la eficacia de los fuegos artificiales, son baratos, bonitos y no se oxidan. Dime¿Quién empezara esta guerra de dos bandas? ¿La pistola o la hoja del cuchillo? 

Ven conmigo a tomar una taza de té

La locura me consume poco a poco en estas cuatro paredes de las que soy incapaz de salir, soy consciente de ello pero… No me atrevo a salir. NI EN BROMA PIENSES ESO. Yo no tengo miedo de salir, es simplemente que no tengo ganas de moverme de aquí. Porque si me muevo igual lo estropeo todo. Estoy a gusto, solo pero a gusto. ¿Qué tal si entras? Me ayudarías a no sentirme solo ¿sabes?
Échame una mano ¿quieres? Ayúdame a no estar  solo.
Soy consciente de que estas cuatro paredes no son suficientes para mantener a un alma tan agitada como la tuya. Yo se que por ellas y por mi negación a salir de estas, mi locura va en aumento. Simplemente mi alma no es como la tuya,  la mía se deja llevar.
Solo quiero estar contigo, oler el perfume de la tierra mojada y sentirme libre. Tomar un café mientras me fumo un cigarrillo y abro un libro… Sumergirme contigo en las profundidades de ese mar de letras, comenzar la historia que jamás comenzamos y ponerle un final digno, porque este no me gusta. No me hace sentir del todo a gusto.

La rosa y el violinista

El paraíso no es tan expectante como parece, las nubes no son tan esponjosas como crees. Muchos hablan como si lo conocieran cuando no es más que el paraíso del olvido. Árboles mustios, una brisa que te cala el alma solitaria y perdida, y como no, una niebla espesa que te envuelve en silencio de arriba abajo. Caminas entre hojas secas y suelos encharcados de barro y piedras hasta encontrar una vía de escape. Sólo unos pocos recuerdan quienes eran y sólo son unos pocos los que recuerdan este lugar del que no les esta permitido hablar.
-Lord, mi Lord perdóneme, hice mal y ahora merezco un severo castigo, pero oh mi Lord, a mi glorioso Lord le pido perdón,  le suplico, le ruego y le pregunto, si podría perdonarme.
En ese camino todos podemos llegar a la salida pero los elegidos por la mano santa están obligados a teñir sus alas blancas, tornarlas de negro. Descender de los cielos a mantener la balanza y controlar que todo este a partes iguales de alguna manera. Cada día mueren millones de personas y un cinco por ciento consigue encontrar la salida y volver a renacer, de los cuales sólo cuatro recuerdan esa  muerte amarga. Estos últimos serán escogidos por la mano santa y serán obligados a mantener la balanza hasta perder subida a manos del Lord. Y el gran Lord es quien decide el color de sus alas.
-No puedo perdonarte, tu falta ha sido demasiado grave. Esta terminantemente prohibido hablar de esto, y mucho menos enamorarse de un simple humano…
Los pocos que consiguen salir de esta maldición eterna, viven como monstruos en tierras terrenales, todos los ángeles de alas negras que deciden arrastrarlas por esos suelos acaba cometiendo el error de adquirir algo de humanidad. Los ángeles de alas negras caídos del paraíso y que consiguen escapar de la horrible tarea que se les otorga pueden decidir perder sus alas por otra forma de vida sin ser la  humana, donde la mano divina no te pueda alcanzar, y esperar que, en tu eterna vida no pierdas el alma, y la mano del gran Lord se pose sobre tus hombros para soltar su ira, dar castigo a tus actos…
-Lavernne, haz tú trabajo con este súbdito infame. Hoy me encuentro demasiado cansado para hacerlo yo.
-Si, mi Lord.-me arrodillo, en señal de respeto y por obligación, mientras coloco la mano derecha sobre mi corazón.

La mentira del artista

-Como quieras- se escogió de hombros.- Escarlata.
-¿Giorgio?-”Imposible Giorgio era mas viejo, considerablemente, mucho más, además nunca se vestiría así, no tenía estilo, decía que él era transparente como el aire y que le gustaba camuflarse entre la gente, escondiendo su modo de ser. Decía que era una estupidez ponerle nombre a las maneras, pero que la gente lo hacía así que él se negaba a formar parte de ese juego, y la única manera de conseguirlo era camuflandose entre el resto”.
-Así me llaman, pero no creo que sea él que buscas.
-Tienes razón, él no es tan imbécil.
Segui andando, “Seré idiota. Idiota,idiota, idiota”. La pregunta era: ¿Por qué ese nombre, de nuevo? Sólo él me llamaba así.
-¿Vas a seguir pasando de mi?
-Si sigues incordiando eso va ha ser un poco difícil ¿no crees?
-Yo soy el hijo de Giorgio, Giorgio Amany. Mira que me lo dijo, me dijo que no iba a ser fácil hablar contigo. 
-¿Dónde esta?-paro en seco.
-Pudriéndose en lo más profundo del suelo, siendo devorado por los gusanos.
-¿Cómo?-creí haber oído mal, un error, en fin era el hijo de un buen hombre, el hijo de un hombre como él no podía hablar de esa manera.
-Criando malvas en el cementerio de Riddentton.
Le doy un manotazo en su cara llena de sarcasmo y recelos.
-Ni si quiera te he preguntado si quieres salir conmigo y ya me rechazas.
-Ninguna persona que se precie hablaría así de Giorgio.
-No lo conocías.
-Lo conocía muy bien.
-Sabes, cuando vi tú foto le pregunte, por primera vez en su vida dijo una verdad sólida. Estuve buscando una escusa para hablarte y cuando la encuentro... Boom. Tocado y hundido en mi propio barco. Ya sé porque te tenía tanto aprecio, no eres de las que se dejan vencer. En fin ya nos veremos .-su mirada estaba llena de ira, su expresión parecía reclamar arrepentimiento, pero por otra parte la melancolía quedaba reflejada en el rostro. Se da la vuelta y se pierde entre la multitud.

Petter Blunt- Un autoestopista despreciado por la carretera

Llega a la autopista mojado hasta las napias, con un frío que le recorría cada centímetro de su piel. Un autoestopista en una carretera que lo desprecia, y lo empapa con mierda de la buena.
-Joder, será hijo de puta.Ya podría haberse pasado al otro carril. A ver que hago con esta mierda. Por lo menos se podría haber disculpado o algo.
Un coche para, y una señora le pregunta:
-¿Te llevo?
Él se lo piensa, "Que tengo que pensar, el pueblo más cercano sin contar con esos engreídos esta a unos 150 kilómetros, seamos sinceros Petter ni de coña llegarás hasta allí con el frío que tienes"
-¿Cómo se te ocurre salir con este temporal?
-Locuras de jóvenes, ¿no le parece?-No le hace mucha gracia haberse subido, pero menos le hace que le pregunte así que miente como un descosido.
-¿Cómo te llamas?
-Arthur Norton.
-Y bien Arthur, a dónde tiene pensado ir.
-Al pueblo más cercano que le quede.
-¿No tiene sitio donde dormir?
-Cualquier sitio es apto para dormir mientras tenga techo señora-una de las pocas verdades que diría esa noche.
-Yo vivo sola si quieres puedes quedarte en mi casa hasta que quieras.
-No gracias, bastante ha hecho ya.-"No se que es lo que piensa esta de mi, pero de seguro que no es lo que se imagina"
Silencio un largo he incómodo silencio. Sólo se escucha el ruido del viento al chocar en los cristales, a la lluvia golpear la pintura del coche y la respiración de la señora. Unos cuarenta y largos, pelo de color cobrizo, ojos marrón oscuro, nariz pequeña;  algo puntiaguda, y labios al natural.
-Me recuerdas a mi hijo.
"No,no por ahí no pase señora. Ahora soltara el rollo. En fin subiré el volumen de la música... Genial se me ha quedado sin batería."

Manuscrito revolucionario 2012

Sueñas con abrir los ojos en un mundo "diferente" pero por mucho que despiertes no encuentras nada nuevo, es la misma guerra de siempre. La lucha contra el reloj, la lucha contigo mismo y la lucha entre lo que algunos llaman nación y otros corrupción. Unos mueren bajo el nombre de patria otros a eso lo llaman paria, falacia, ignorancia...Y es triste ver y darse cuenta de que realmente tienen razón.
Los grafitis adornan algunas de estas calles tan perfectas y refinadas, Don Miscallessonmiscallesytunolaslleenasdemierdasporquelodigoyo, pero que después es capaz de cobrarte por ver uno de ellos. ¿Cómo se supone que se llama eso? Mi libertad de expresión queda reprimida sólo por que tú, dichoso infeliz que te aprovechas de las personas  a las que has jurado ayudar, no te gusta que te tiñan las paredes con verdades, eso es lo que os pasa a todos los que llegáis a la cima y os creéis mejores que los demás. Yo me considero un artista, si, lo soy amigo mío, ¿me va a ahorcar por eso? Pues yo pondré el cuello encantado, pero moriré siendo artista y nadie podrá cambiar ese hecho.
Mientras tú te llenas los bolsillos con el sudor de mi frente, yo trabajo en este dichoso mundo para poder vivir como lo que soy, un artista. ¿Me oyes? Un artista. Y no dejare de decirlo hasta el día en que me muera. Yo voy y pinto las paredes tan sosas de tus calles con verdades como templos, gratis, hago retratos, gratis, música, gratis y escribo historias, gratis. Tú vendes mentiras por impuestos, robas dinero para un chale en la playa, juegas a dos caras y nadie os dice nada. YA ESTA BIEN. Basta ya de mentiras y hurtos, no me digas que todo saldrá bien si yo te dono un riñón y tú me quitas los dos.

Porque yo no seré lo mejor del mundo, no me comeré una rosca, pero tú te llevas la palma de lo aguantable, la gente como vosotros me repugna y me da arcadas. Muchos artistas mejores que yo, mucho mejores que yo, están en la calle con una guitarra al hombro o un pincel en la mano, toda su vida estudiando los dotes artísticos para acabar en la esquina de un bulevar, y tú, tú qué has hecho, mentir y mentir, llegar a la cima y seguir mintiendo; sin embargo tu vives como un rey y los artistas-por poner un ejemplo- como escoria de la sociedad.
BASTA, YO DIGO BASTA. La humanidad no gana nada con esto (ustedes no vais incluidos en ella como cabe esperar de seres tan inhumanos). Levantemos nuestras manos contra este capitalismo escondido en esta falsa democracia. Hagámoslo  a lo V de VENDETTA, porque estos no entienden de informes ni quejas, seamos nosotros los que marquemos tendencia y no las mentiras, dirijamos nuestras decisiones,cada uno por un lado pero respetando libertades. Pueblo alzad la voz y observad a vuestro alrededor, dentro de poco esta mierda en la que nos han hundido nos comerá sino hacemos nada al respecto. Mientras ellos viven como reyes a nuestra costa nosotros nos pudrimos en los rincones de esta ciudad construida a base de mentiras, mentiras que siempre acabamos por creernos por dar un voto de confianza a los altos mandos, pero ellos siempre abusan de ese voto de confianza. Armaos de valor, sacadlos del poder, quitadles sus tridentes y habrá libertad. Su visión de futuro son sus bolsillos, tened en cuenta que no piensan en vosotros sino en ellos. Si te hundes no serán capaces de tenderte una mano.

Hagamos del mundo un lugar mejor, un lugar sin barreras, sin etiquetas, sin mentiras... Sólo verdades y libertad.

Petter Blunt

Quería llorar pero se le olvidaron sus lágrimas, estaba solo, triste y solo. Nadie podía ayudarlo porque no había nadie que estuviera lo suficientemente cerca como para hacerlo, y no es que él se fuera a dejar, tampoco es que alguien de allí quisiera hacerlo. Se limita a tumbarse en la cálida tierra de nadie a mirar el cielo y contar estrellas. El cielo comienza a llorar por él, pero Petter simplemente cierra los ojos y abraza con su piel las frías monogotas que lo empapan y recorren sus vestimentas. Comienzan a caer truenos, pero a Petter no le importa, suenan maravillosos. "Quizás debería volver. Un resfriado es lo que me faltaba, pero que más da, lo tengo decidido, no volveré a esa casa endemoniada por mucho que le pese a la idiota de Elena. Por mi se puede ir al cuerno".Se levanta, mira desde lo alto el pueblo, con aires de superioridad pero en el fondo lo que le destroza es que sabe que eso no es así, él era un fallo, un mal nacido en aquel pueblo. Pero no había hecho nada para merecer tal medalla. No le habían dado una oportunidad, se avergonzaban de él, y ahora era él quien pretendía demostrar que era mejor que ellos, porque nunca se los reprocho en cara, siempre acallo y lo guardo todo para si. Si ellos le decían que tirara piedras a su propio tejado, lo haría, a sabiendas que se le caería encima después. Pero eso se acabo, ahora sabe que por mucho que se esfuerze le será en vano sino le dan una puñetera oportunidad.
-REPROCHAME ESTO AHORA, CACHO ZORRA.-Grita al vacio.
Se da la vuelta, con las manos en los bolsillos y con sus pies arrastra una piedra a patadas. Se pone sus cascos y comienza a escuchas música deprimente, se sentía así, y la lluvia lo hacía sentirse aun peor."Quizás no llegue a nada, pero no por eso tengo que ser tratado como escoria, sigo siendo una persona no un jamón para perros. No seré un héroe ni falta que me hace, los héroes siempre ganan, yo no he ganado en mi vida y no pienso comenzar a hacerlo ahora".

Danessis

Eran un grupo, un bajista mal amañado haciendo porros, un batería experto en humo, un guitarrista que no sirve para ayudar, ni si quiera a si mismo y hacedor de bromas, y un cantante algo loco. Un buen conjunto de cosas, un grupo formado por el afán de tocar unos instrumentos en algún lado que soportarán sus notas. Gratis, por dinero, que más da, lo interesante era tocar.
-Graham, pasame caballo.
-Levantate y hazte uno, este es mio.
-Si lo digo para ayudarte, que llevas media hora intentando armar un dichoso porro. Que no es tan difícil, joder.
El humo llena la habitación, Alex se tambalea para ir a coger una cerveza a la nevera-pequeña y llena de comida no comestible a parte de algún que otro sandwich aceptable-de ese cuchitril.
-Oye, ya que vas traeme una a mi también.
-Con alcohol o sin alcohol.
-Tío, se te ha ido la olla. Cómo preguntas eso. Sabes que sólo compramos con alcohol.-Damon se ríe.
-Tú dime.
-Que mal esta el patio, colega. Creo que el colocon se te ha subido a la cabeza.
-Te voy a traer una sin alcohol.
-Si la encuentras-Damon se ríe.-oye sabes cuánto es dos más uno.
-No estoy tan mal, eso son...-cuenta con los dedos-seis-ve doble, es comprensible.
-No, eso son dos burros jugando al uno.
-¿Los burros juegan a eso?-Contesta Alex agitando una de las latas.
-No lo sé, a lo mejor vuelan y ni si quiera lo sabemos.
-Tíos, tíos. Mirad Graham ha conseguido armar su primer porro.-dice Niko.
-Si, si, no cantes victoria todavía.-todos le miran.- Ves si ya te lo dije yo.-dice el guitarrista.
-Me rindo, así no hay quien se coloque, esto es una mierda.
-Toma-le dice Alex a Damon.
-Je, je... No puedo leer lo que pone en la lata. Pero mañana, mañana lo miro, seguro que pone con alcohol.
-Lo que tu digas.
-Trae pa´ca que me estas poniendo nervioso.-Niko termina el porro.
-Trae que ese es mio.
-Te esperas, que lo voy a encender.
-Si hombre para que te lo fumes todo.
-La próxima vez te esnifas algo, así no te quito los porros.
La cerveza sale disparada, empapa por completo a Damon. Este empieza a reirse.
-¿Qué cojones habrá pasado?-dice entre risas Damon.
-Ahí lo tienes sin alcohol, ya no te queda nada en la lata.-Suelta Alex sentándose en aquel puf de color gris verdoso.
Todos ríen.
-Oye ya no queda más.-dice Alex.
-Bah, lo mismo da.-Contesta Niko.
-Si que da, yo todavía no me he colocado. No he podido más que aspirar el humo que desprenden los porros que me habéis robado.
-Vamos hombre todo el mundo sabe que el humo coloca, en menor medida pero coloca.-dice Niko.
-Ya te colocarás otro día.-le dice Damon.
-Si, cuando sepas armar un porro.
Los tres se echan a reír. Al final acaban quedandose dormidos entre cervezas y porros.

La bala perdida

Se ve decidido ha apretar el gatillo de su viejo revolver, tiempo atrás me dijo que pretendía usar la última bala para el acto más humano que vería en toda su vida.
-Ni se te ocurra apretar el gatillo, ¿me oyes? Ni se te ocurra. No te lo perdonaré.-suplicaba con el llanto en los ojos. Él estaba decidido a pulsar el botón de salida y ella a detenerlo.
-Largate, dejame apretar el gatillo. No quiero que veas este estropicio.- contesto con serenidad.
-No puedes hacerlo, no puedes hacer me esto, yo te quiero.
-Yo también te quiero.
-Dejalo para otro día, guardala y hazlo otro día, por el amor de Dios guarda esa cosa.
-Lo tengo decidido, es ahora o nunca.
Ella se acerca, él se sienta en el sofá apaga su último cigarillo, carga la pistola y apunta. Sus manos tiemblan y ella se acerca más despacio.
-Atrás-grita-No quiero mancharte, dejame un poco de intimidad ¿quieres?-dice casi en susurros-Si das un paso más, disparare, y ninguno de los dos quiere que tú lo veas, así que sal por esa puerta.
-Sólo dame una razón, sólo una, y si es convincente y sincera me marcharé por donde he venido.  
-No dejo de ver sus caras, de oír sus gritos y  no poder hacer nada.
Ella estaba allí,eso le hacía dudar del momento en el cual debía apretar el detonador. No quería hacerle más dañode que iba ha hacerle.
-Eso no es una escusa. No puedes apretar el gatillo, no puedes suicidarte sin más.
-Dame una buena razón.
Silencio, ella tiene su secreto, él tiene el suyo ambos tiran del hilo pero ella afloja su parte y le cuenta el suyo.
-Vas ha ser padre.
Ella se tira de rodillas al suelo y con la cabeza entres sus finas manos llora y llora. Él dispara su revolver contra el sofá, lo suelta, se levanta y sostiene entre sus brazos.
-Entonces la bala no me sirve de nada- le susurra.
Ella se agarra fuertemente a su pecho, lo abraza y no quiere soltarlo, él se deja, no tiene ganas de levantarse ni fuerzas para decir algo. Su decisión, su bala, años de pensar como iba hacerlo, años en decidirlo y una frase tan simple como esa le hizo cambiar de opinión. Por una parte se arrepiente, ahora le toca sufrir por los restos.

"Nunca quise tirarme desde lo alto, me parecía más elegante un revolver y un sofá"

El don de la palabra

-Hey, pequeño, ¿nos conocemos? Tu cara me suena.
-Ya no soy tan pequeño después de todo,me alegro que te acuerdes de mi. ¿Acaso la culpa llamo a tú puerta?
-No te entiendo.
-Eramos dos, ahora sólo queda uno, uno se plasmo en el carretera, y el otro lloro, pidió ayuda pero nadie llego hasta poco después, cuando un conductor le ofreció su mano y tuvo piedad. La ayuda fue en vano, la vida que el pequeño niño sostenía en sus manos se le escapo de sus resbaladizos dedos. ¿Lo recuerdas ahora?
-¿Vienes a matarme?
-Eso sería tener piedad amigo; no, la piedad y la vanidad no son cosa mía.
-¿Dinero? ¿Qué acabe en la cárcel?
-No, no, me esta mal interpretando. Pero por favor, ¿qué películas ha visto usted? Esta es la vida real, aquí los justicieros no existen. He venido a vengarme, eso que no se le valla de la cabeza, pero no quiero que confiese, no quiero matarlo y sobre todo no quiero dinero. Una caja de cerillas y un paquete de cigarros son más que suficiente por ahora.
-¿Fumas?
-No, pero queda bien. Bueno, encantado de haberlo conocido de una puñetera vez, esto no es nada personal, en verdad si, me ha caído genial, si hubiese parado el coche mi hermano quizás estaría vivo, o muerto pero en cualquier caso yo no me habría colado por su ventana trasera. Que cosas tiene la vida ¿no? Nos volveremos a ver, tenga por seguro que le haré la vida imposible y su existencia amarga, ni si quiera tendrá ganas de levantarse del sofá en el que esta empotrado. Ya lo verá. No, no es una amenaza, esto es una advertencia.
El viejo hecha una última calada a su cigarro y lo apaga en la mesita del salón que se encuentra al lado de su pequeño sillón. Aplaude y se ríe, aplaude y se ríe. El chico del cabello de limón se da la vuelta, esta decepcionado ¿por qué esta tan feliz?
-De verás crees qué puedes hacerme la vida más imposible de lo que ya lo es. Mi mujer ahogo a mis hijos en la bañera, ahora esta en un loquero y me odia por no quererme suicidar con ella, a saber el porque de este estúpido drama, en cuanto a mi, vivo sólo cobrando una puñetera jubilación y el cáncer me consume los pulmones. No tengo ganas de moverme del sofá duermo aquí, apenas como, me da pereza levantarme ha abrir la nevera, me siento aquí con mi copa de vino, mi cigarrillo y la radio. ¿Crees que mi vida podría ser peor de lo que ya es?
-¿Pretendes darme pena? Olvidalo, por lo menos tienes la vida resuelta entre cigarrillos, mi hemano ni si quiera tuvo el placer de provarlos.
"Que valor, que coraje, me gusta este chico." piensa el carcamal, cincuenta y seis años e incontables cajas de tabaco y botellas de vino vacías. Una vida llena de milagros y desgracias marcada entre sus arrugas. Una radio que nunca supo consolarlo, pero en sus venas queda marcado el ritmo del blus. Y ahora una sola frase de un muchacho, de un simple muchacho, le ha hecho sentirse más valioso y privilegiado de lo que es. "El don de la palabra, el don de la palabra"