-Jamás he dicho eso.-sonríe mientras hecha una calada.
-¿No decías qué era una mierda?
-Ya pero de primera.
-Lo sé, la hago yo-sonríe.
-En serio es la mierda más buena que he provado. La última vez me supo a estiércol.
-Cat...-le mira extrañado.
-Ni se te ocurra preguntar.
-Esta bien-levanta las manos mientras se da la vuelta y se sostiene encima de los barrotes con sus codos. Le sonríe, con esa sonrisa tierna, cálida y amistosa que siempre buscó y que nunca encontró. Pero para ella eso no significaba nada, nada más allá del tió cutre del bar a trozos al que iba a mirar todas las noches de su vida por sentirse identificada con el ambiente.
-¿Qué soy para ti?
-Pues la chica que quiero meter en mi cama.
-Corta el rollo Zack.
-Pues no lo sé, por ahora la tía sin nombre con la que paso el rato las noches de amargo sosiego ¿por?
-Entonces no soy nada o me equivoco.
-Si y no.-ve su mirada confusa y comienza a explicar-Me gusta pasar el rato con alguien pero me daría igual quien, si ese desapareciera ya encontraría a otro o quizás no pero me adaptaría. No es nada del otro mundo ¿sabes?-sonríe.
-Es lo más bonito que ha soltado tu sucia lengua esta noche.-vuelve a dar otra calada mirando al cielo. Da un salto a la acera, le dolía el trasero de estar sentada en la valla.
-¿Gracias?
-Supongo-se encoge de hombros, aspira parte del humo para tirar el porro y pisarlo.
-¿Y yo qué?-dice refiriéndose al porro con un tono burlón sin moverse del sitio.
Lo coge del cuello de la camisa, posa sus labios con fuerza sobre los de Zack y suelta su última calada.
-Ahora enserio, deberías dejar de fumar esa basura, por muy buena que sea sigue siendo mierda.-se da la vuelta.
-Cat-la agarra del brazo-Me...
-Si Zack, te voy a dejar con el calentón-sonríe con aire jactancioso-No estoy lo suficientemente cuerda o puede que no este tan borracha.
Zack la suelta con una sonrisa de oreja a oreja.
-Qué descanses rubia.
La chica de los gatos se da la vuelta y le hace una mueca, camina al olvido de las farolas. Cuando vuelve a reanudar la marcha a derechas se despide con la mano, y aunque Zack sabe que no le esta viendo no puede evitar sonreír y despedirse con un movimiento de cuello.
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